Descripción del proyecto
La agricultura en España es una actividad económica muy competitiva dado que contribuye positivamente al balance comercial con un superávit de 10.204 M. Esto se debe fundamentalmente a la producción de frutas que se localiza sobre todo en la costa mediterránea. En estas zonas de cultivo, el principal reto al que se enfrenta la agricultura es el de continuar proporcionando productos de calidad y seguridad haciendo frente a una cada vez menor disponibilidad de agua. Por ello, además de continuar con las modernizaciones de los regadíos, es cada vez más importante incrementar la eficiencia en el uso del agua en parcela. Hoy día, el riego localizado es el sistema de riego más eficiente, aunque la tecnología actualmente disponible no está adaptada a las necesidades y peculiaridades de los cultivos leñosos. En estos cultivos las necesidades hídricas van aumentando a medida que incrementa el desarrollo vegetativo del árbol. Del mismo modo, el sistema radicular que al principio de la plantación está restringido a zonas cercanas al tronco del árbol, se va paulatinamente desarrollando para explorar áreas del suelo de la parcela cada vez más alejadas del tronco. Todo ello implica que la instalación de riego debe ser capaz de ir incrementando el volumen de agua que aplica y la superficie mojada por los goteros. Actualmente, los sistemas de riego localizado más frecuentemente empleados tienen goteros ya integrados en la tubería y lo más económico es no modificar la instalación de las mangueras porta-goteros tras la plantación. Por lo tanto, en los primeros años de vida de la plantación, la instalación de riego está suministrando agua entre de dos árboles consecutivos en los que no hay presencia de raíces. De este modo se provoca una pérdida considerable (hasta un 62.5% y en promedio un 31.25%) de agua y nutrientes suministrados. Los goteros se pueden hoy día taponar mediante sistemas auxiliares que deben instalarse y desinstalarse manualmente, lo que implica un alto costo en mano de obra, de allí que esta práctica no se realiza comúnmente.Por todo ello, el objetivo principal de este proyecto es incrementar la eficiencia en el uso del agua de los sistemas de riego localizado por goteo para cultivos leñosos mediante el desarrollo de nuevos sistemas de bloqueo de los emisores, que permitan la liberación controlada de agua en función de la demanda hídrica del cultivo. Para ello se emplearán nuevos materiales biodegradables, hidrosolubles, minerales u orgánicos que serán integrados en el emisor, cuya función será la de actuar como elemento bloqueador de la salida de agua de los goteros, de modo que se eliminen sin la intervención de mano de obra externa cuando el cultivo requiera una mayor demanda de agua, sin además dejar residuos en el ambiente. Mediante los desarrollos propuestos, se conseguirá también reducir los costes energéticos del regadío contribuyendo así a garantizar la sostenibilidad económica de este sector clave para la producción agraria española e internacional. El resultado de este proyecto se transformará en un nuevo producto actualmente no disponible en el mercado a nivel mundial, ya que las soluciones planteadas hasta este momento no permiten disponer de un sistema de riego diseñado específicamente para cultivos leñosos, lo que demuestra su carácter innovador. En paralelo se definirán nuevos diseños agronómicos del riego por goteo con el fin de determinar el volumen de suelo mojado necesario para optimizar el estado hídrico de la plantación, sin incrementar en exceso la tasa de evaporación de agua desde el suelo. El proyecto comenzará el 1 de julio de 2016 y tendrá una duración de 30 meses y un presupuesto de 670.143 . El consorcio estará formado por: Sistema Azud (AZUD) gran empresa ubicada en Murcia que actuará como líder, SALEPLAS, PYME de Castilla La Mancha y el Departamento de Riego del Centro de Edafología y Biología Aplicada del Segura (CEBAS-CSIC), instituto de Investigación que pertenece al CSIC.