Descripción del proyecto
En la provincia de Castellón se concentra el 95% de la producción de baldosas cerámicas en España, siendo nuestro país el primer fabricante de la UE y quinto productor mundial, con una producción en el pasado año 2021 de 587 Mm2 y una facturación de 4855 M. La fabricación de baldosas cerámicas es un proceso que consume mucha energía (30-40 kWh/m2), siendo la energía térmica la más importante. Esta energía se obtiene principalmente de la combustión del gas natural, que representa el 90% del conjunto de la energía directa consumida.Los estudios existentes muestran que los objetivos del Pacto Verde 2030-2050 para el sector cerámico europeo son extremadamente exigentes e inalcanzables con las tecnologías y políticas actuales. Por lo tanto, su aplicación exige cambios radicales del proceso de fabricación. De no conseguirse, esta situación implicaría un aumento pronunciado de los costes de fabricación, una pérdida de competitividad y un riesgo real de deslocalización de la producción a terceros países.Actualmente, la preparación de las materias primas se realiza por la denominada vía húmeda, mediante el secado por atomización de una suspensión. Este procedimiento es responsable del 95% del consumo de agua (el agua se evapora en el proceso), un 34% del consumo energético (mayoritariamente energía térmica) y un 32% de las emisiones de CO2 (se utiliza gas natural como combustible) del total del proceso del proceso de fabricación de baldosas cerámicas.Potencialmente, el procedimiento alternativo a la atomización sería la granulación vía seca; sin embargo, los gránulos obtenidos actualmente con este procedimiento no permiten alcanzar la calidad del producto deseada. Mediante el uso de aditivos ligantes/plastificantes, de nuevas materias primas y pequeñas modificaciones en el proceso de granulación sería posible obtener gránulos con las características adecuadas. Adicionalmente, la eliminación de las restricciones impuestas por el procedimiento vía húmeda permitirá el uso de materias primas parcialmente solubles o con una plasticidad excesiva. Así mismo, la tecnología de materiales desarrollada permitirá el uso de materias primas locales y/o secundarias, lo que supondrá un ahorro adicional de energía, aumentará la independencia geoestratégica e incrementará la sostenibilidad global del proceso de fabricación.Como consecuencia, el proyecto se alinea con la prioridad temática 11: Reducir el consumo futuro de energía y las emisiones de gases de efecto invernadero en la industria, ya que el cambio de tecnología en la preparación de las composiciones cerámicas, el uso de nuevas materias primas y la aplicación del principio de la economía circular (utilización de materias primas secundarias) permitirá reducir de forma considerable (entre un 40-50%) el consumo de energía térmica (gas natural) y disminuir de forma drástica (entre un 50-60%) las emisiones de CO2 del proceso de fabricación.