Descripción del proyecto
La producción mundial total de aceitunas de mesa alcanzó más de 3 millones de toneladas en 2021, con alrededor del 30% producido en Europa. España es el principal productor de la UE, pero los productores no europeos como Egipto, Turquía, Argelia y Marruecos son duros competidores. Europa es la mayor región importadora de aceitunas de mesa del mundo, donde casi todas las importaciones provienen de países en desarrollo fuera de Europa, y donde se considera el mercado seguirá al alza en los próximos años. El creciente interés de los consumidores por las aceitunas de mesa en Europa se debe a una combinación de varios factores: la creciente popularidad de la dieta mediterránea, la sostenibilidad, los snacks saludables y la conveniencia de uso. Por este motivo, las empresas españolas necesitan cubrir esta nueva demanda, proporcionando productos novedosos de aceitunas de mesa, que deben se diseñados teniendo en cuenta una alta originalidad, comodidad de consumo, envasado, potencial de mercado, valor nutricional y los factores medioambientales. Los consumidores y la industria alimentaria deben mostrar un sentido de responsabilidad compartida por el futuro del planeta, en cada decisión de compra y en cada alimento producido. Este proyecto pretende contribuir al desarrollo de una próxima generación de aceitunas de mesa, diseñado para las generaciones futuras concienciadas con el medioambiente, integrando bioconservación, sostenibilidad y valorización de subproductos, y que sea un ejemplo para otras empresas y sectores alimentarios. El objetivo principal de este proyecto es desarrollar un sistema de conservación de aceitunas de mesa basado en el uso de bioconservadores y en la gestión integral de los subproductos y aguas residuales de la industria de la aceituna de mesa. El factor impulsor de esta propuesta es lograr un cambio significativo con respecto a los tratamientos de conservación convencionales, reemplazando los aditivos sintéticos y los tratamientos térmicos con el uso de microorganismos y sus metabolitos como agentes bioconservadores (actividad 1). El éxito de la bioconservación evitará el uso de los tratamientos térmicos como herramienta para alargar la vida útil del producto, posibilitando el uso de materiales 100% reciclables y biodegradables. Asimismo, el tratamiento de aguas residuales permitirá reutilizar salmueras y efluentes y extraer compuestos de interés. De esta forma, se garantizará la gestión integral del proceso, minimizando el impacto ambiental de la actividad productiva de la empresa, reduciendo los costes asociados al consumo energético, la compra de aditivos y la gestión de residuos, además de aportar un valor añadido a la aceituna de mesa. subproductos (actividad 2). Finalmente, el aprovechamiento de los subproductos se materializará en el diseño, desarrollo y lanzamiento de nuevos productos, utilizando como materia prima los subproductos, rellenos y algunos de los compuestos de interés con propiedades bioactivas y saborizantes extraídos de las salmueras y efluentes. (actividad 3). Cándido Miró (como coordinador de la propuesta), en colaboración con la Universitat Politècnica de València (UPV), se enfrenta al riesgo que supone la propuesta de incorporar un nuevo sistema de conservación de sus productos, nunca antes empleado en el sector de la aceituna de mesa, que le permitirá reutilizar todos los efluentes de su producción industrial y minimizar los residuos generados por aguas residuales y subproductos. Este proyecto permitirá a la compañía posicionarse como un referente en el mercado global, siendo un modelo de negocio responsable y sostenible.